Por Enfoque Derecho

El presente artículo es parte de la Semana Temática titulada “La Ley en el Cine”. Durante esta semana hemos analizado desde una óptica jurídica las 10 películas nominadas a “Mejor Película” en la 96° Edición de los Premios Oscar. El día de hoy, presentamos este breve artículo en el que analizaremos los elementos jurídicos de dos de las películas más aclamadas del año 2023: “Killers of the Flower Moon” y “Anatomy of a Fall”.

Anatomy of a Fall

“Anatomy of a Fall”, también conocida en castellano como “Anatomía de una caída”, es una película francesa dirigida y coescrita por Justine Triet (el otro escritor es Arthur Harari) y protagonizada por Sandra Hüller. La galardonada película se encuentra nominada a 5 premios Oscar, en los que destaca “Mejor Película”, “Mejor Director(a)” y “Mejor Actriz”, y narra la confusa muerte del escritor Samuel Maleski y el juicio que se realizó a su esposa, la escritora Sandra Voyter. 

Quizás no haya mejor película para analizar desde el derecho que un drama judicial y por supuesto que “Anatomy of a Fall” no es la excepción. Como dijimos, la película muestra el juicio a Sandra Voyter por la muerte de su esposo Samuel Maleski. El desarrollo de este juicio invita a los espectadores a reflexionar constantemente sobre el derecho de defensa, particularmente al derecho a probar, y la actuación de los jueces durante su ejercicio.

La película es bastante reservada cuando nos habla de la muerte de Samuel Maleski: Lo vemos yacer muerto en la nieve luego de una caída, pero nunca se muestra realmente cómo ocurrieron los hechos. En lugar de eso, la película nos muestra a Daniel Maleski, hijo de la pareja, pasear a su perro Snoop en la nieve. Por si fuera poco, cualquier tipo de ruido que haya podido causar la caída o una hipotética discusión es ocultado por una fuerte reproducción en loop de la versión instrumental de “p.i.m.p.”, canción de 50 Cent. 

En este complicado escenario, donde ni siquiera el espectador sabe con certeza qué ocurrió, comienza un juicio donde Sandra Voyter, la única persona presente en la casa cuando ocurrieron los hechos, es acusada del asesinato de su esposo Samuel. Para esclarecer los hechos y convencer al jurado, tanto el fiscal como los abogados de Sandra Voyter actúan diversos medios probatorios. 

Sin embargo, el equipo de la fiscalía accionó de forma errónea sus medios probatorios o presentó algunos que no debieron ser admitidos por la jueza. En primer lugar, la fiscalía comienza el juicio llamando a testificar a Zoe Solidor, una estudiante universitaria que intentó entrevistar a Sandra al inicio de la película, pero que fue interrumpida por la fuerte música de Samuel. 

Si bien Zoe estuvo presente en el hogar de la familia minutos antes de la muerte de Samuel y podía ser una testigo valiosa, el interrogatorio fue impertinente. Durante este, las preguntas de la fiscalía estaban mayormente dirigidas a cuestionar la vida sexual de Sandra y convencer a los jurados de que la entrevista era, en realidad, un intento de seducción que produjo una presunta discusión entre los esposos. Esto produjo un claro alejamiento de los hechos discutidos en ese momento.

Además, casi al final del juicio, el fiscal empieza a leer fragmentos de la última novela de Sandra, en la que su protagonista fantasea con asesinar a su esposo. De acuerdo al fiscal, dicho fragmento sería una prueba de que Sandra tuvo la intención de asesinar a su esposo y que, al igual que otros momentos de su vida, decidió materializarlo en su novela. En este caso se trata de una prueba inadmisible porque las novelas son obras de ficción que, si bien pueden demostrar las opiniones y visiones de su autor, no pueden usarse como prueba para argumentar el ánimo de asesinar a alguien.

Aunque la película no lo vuelve explícito, sí fueron usuales las tomas en primer plano a la jueza que permitían inferir una crítica al accionar de la jueza. Lejos de controlar la actuación del fiscal, la jueza fue bastante permisiva con él y permitió un mal uso de los medios probatorios o, en el caso de las citas literarias, permitió que se usen medios que no aportaba nada relevante al juicio y volvían aún más confusa la situación.

Killers of the Flower Moon

“Killers of the flower moon” es una película dramática estadounidense dirigida por Martin Scosersese y protagonizada por Leonardo Di Caprio, Robert De Niro, Brendan Fraser y Lily Gladstones. La película se encuentra inspirada en el libro de David Grann, basado en hechos reales,  “Los asesinos de la luna de las flores: Los crímenes en la nación Osage y el nacimiento del FBI”. En ese sentido, la historia está ambientada en la década de los años 1920 y narra la trágica muerte de los habitantes del condado de Osage, Oklahoma, debido a los crueles delitos cometidos en contra de ellos por parte de los “blancos americanos” con la finalidad de quedarse con sus tierras y el dinero que aquellas representaban. Bajo esa línea, la perspectiva a tomar en cuenta, para el presente análisis, será la vulneración de los derechos humanos cometidos hacia este grupo y el debido juicio que se llevó en relación a ello. 

En la película se muestra que la comunidad de Osage descubre entre sus tierras una gran cantidad de petróleo, lo que le otorga riquezas en abundancia. Sin embargo, el prejuicio que se tenía hacia los nativos en aquel momento generó que el gobierno de Estados Unidos los catalogara como incapaces de poder manejar eficientemente estas riquezas. En consecuencia, se les otorga un grupo de “tutores”, conformado por hombres blancos, para que estos se encarguen de gestionar el dinero.

En un primer momento, se da la aparición de Ernest Burkart, el protagonista, que tras la Primera Guerra Mundial decide ir a vivir junto a su tío William King Hale, quien es arduamente querido por el pueblo, ya que constantemente hace de benefactor y participa de las reuniones y celebraciones de la tribu. Sin embargo, en la película se muestra que King, en realidad, se encuentra detrás de las misteriosas, repentinas y constantes muertes de los miembros de la comunidad. 

Es así que King convence a su sobrino para que se case con Mollie Kyle, una nativa adinerada de la comunidad, para luego asesinarla y que este pueda tomar posesión de su patrimonio a través de sus derechos hereditarios. Sin embargo, Mollie contaba con una madre y dos hermanas, quienes, al igual que el resto de la comunidad, repentinamente fallecieron bajo diversos sucesos. Es así que, en la película se muestran escenas en las que los americanos asesinaron a los nativos para tomar posesión de sus riquezas. Asimismo, se puede visualizar la forma en las que manipulan las escenas del crimen para que, a través de jueces corruptos de la localidad e investigaciones fraudulentas, las muertes fueran catalogadas como suicidios o meros accidentes. Aquello demuestra que “Osage” era un lugar abandonado por la ley.

Ante este panorama, Mollie, quien ya se encontraba siendo envenenada por Burkart, preocupada por los acontecimientos decide pedir ayuda directamente al gobierno, quienes envían a agentes federales a investigar los sucesos. Rápidamente, con las debidas investigaciones, éstos descubren la verdad tras las muertes de los habitantes del pueblo y capturan tanto a Ernest como a King para llevarlos a juicio. 

Ya en la escena final de la película, se muestra cómo es que los protagonistas acusados son interrogados por diversas autoridades. Sin embargo, es Ernest quien, tras la muerte de su hija, decide confesar y afirmar los crímenes realizados por él y por su tío. En consecuencia, ambos son considerados culpables y son condenados a cadena perpetua. 

Si bien los principales autores de los crímenes realizados fueron enjuiciados y obtuvieron sus debidas sanciones, se debe recordar que ellos no fueron los únicos autores de los delitos. Esto se debe a que los jueces corruptos, médicos fraudulentos y proveedores de veneno, también fueron partícipes de la muerte de todas esas personas; sin embargo, jamás se les realizó un juicio. 

Conclusión

A manera de conclusión, podemos ver cómo ambas películas aportan elementos interesantes para el análisis jurídico, tanto desde la perspectiva procesal como desde la vulneración de derechos humanos a comunidades nativas.

Por un lado, al ver “Anatomy of a Fall”, podemos apreciar distintas instituciones del derecho procesal, particularmente la presentación y uso de medios probatorios. Si bien estos tienen el propósito de asegurar el derecho de defensa y argumentar la posición de las partes, la película nos muestra que, sin llegar a la ilegalidad, estos pueden ser usados de forma incorrecta. Ante esto, es necesario que el juez tenga un rol activo y no permita excesos de ninguna de las partes.

Por otro lado, cuando hablamos de “Killers of the Flower Moon” , podemos notar que esta no es una película que simplemente narra la historia de las trágicas muertes de los pobladores de “Osage”, pues su trama también hace reflexionar al espectador al momento de demostrar la falta de moral que pueden llegar a tener las autoridades en cuanto se debe a la acumulación de riquezas. En ese sentido, en lugar de que los abogados o jueces cumplan con su rol de impartir justicia, estos se convierten en un medio más para que el ser humano pueda conseguir sus más oscuras ambiciones

Escrito por Luis Angel Rivera y Marialitz Fasshauer