Por Enfoque Derecho.
- Introducción
En junio de este año, se aprobó con 72 votos a favor, 40 en contra y 6 abstenciones la iniciativa legislativa que introduce el artículo 8-A en la Ley 29158, la Ley Orgánica del Poder Ejecutivo. El pleno respaldó la propuesta con el objetivo de facilitar la gestión remota del despacho presidencial en ausencia del presidente de la República en el territorio nacional y sin vicepresidentes en ejercicio.
«En situaciones en las cuales el presidente de la República deba ausentarse del país y no haya vicepresidentes en funciones, se permite de manera excepcional que el presidente continúe liderando el despacho presidencial mediante el empleo de tecnologías digitales. Se hace imperativa la instauración de un sistema de seguridad digital para el uso de dichas tecnologías», señala el texto adicionado.
Además, se establece que la solicitud de permiso para la salida del territorio nacional por parte del mandatario debe incluir la justificación de la urgencia y necesidad de la gestión remota de la presidencia, asegurando al mismo tiempo la seguridad de los medios a utilizar.
A pesar de las críticas constantes, la presidenta ha solicitado ya por quinta vez un permiso para viajar mientras cumple sus funciones de manera remota. En sus anteriores desplazamientos, se reunió con el presidente Lula da Silva en Brasil, asistió a la Asamblea General de la ONU en Nueva York, y visitó Alemania, Italia y El Vaticano.
Por disposición del presidente del Parlamento, Alejandro Soto, se llevó a cabo una sesión del Pleno el 30 de octubre para evaluar la solicitud de salida de Dina Boluarte entre el 1 y 4 de noviembre, la cual fue aprobada. Con esto la mandataria logró la autorización para participar en la Cumbre Inaugural de Líderes de la Alianza de las Américas para la Prosperidad Económica (APEP) en Estados Unidos.
En ese sentido, desde Enfoque Derecho, consideramos fundamental abordar la modificación legislativa que habilita la presidencia virtual de Dina Boluarte, a la luz de los principios constitucionales y legales que rigen la administración del Estado. Reconocemos la importancia de garantizar la continuidad del despacho presidencial en situaciones excepcionales, como lo establece el artículo 8-A incorporado en la Ley 29158. Sin embargo, consideramos pertinente que la presidencia aclare las implicancias y frutos de dichos viajes, especialmente ahora, pues nos encontramos en un contexto económico desafiante.
- Viajes de la mandataria Dina Boluarte
En principio, el Congreso aprobó la solicitud presentada por el Gobierno para autorizar el viaje de la presidenta Dina Boluarte a Brasil. Este viaje tuvo como propósito su participación en la IV reunión de jefes de Estado en el Tratado de Cooperación Amazónica (TCA), programada del 7 al 9 de agosto en la ciudad de Belém do Pará.
La decisión del Congreso, con 62 votos a favor, 32 en contra y 7 abstenciones, respaldó la petición del Ejecutivo, a pesar de las objeciones de algunos congresistas durante el debate, incluyendo a Jaime Quito, Alex Flores (Nueva Constitución – Socialista), Jorge Montoya (Renovación Popular), Wilson Quispe, Janet Rivas (Perú Libre), Edwin Martínez (Acción Popular), Sigrid Bazán (Cambio Democrático) y otros, quienes expresaron su oposición a conceder el permiso.
El Gobierno destacó, a través de un comunicado, que el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, extendió la invitación a la mandataria peruana en marzo pasado. El objetivo de dicho encuentro fue revitalizar los contenidos de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA) de 1978 y del Pacto de Leticia del 6 de septiembre de 2019.
Después de la reunión con Lula, Dina Boluarte se comunicó con TV Perú, mencionando lo siguiente:
«Quiero expresar mi agradecimiento por la amabilidad del presidente Lula, quien fue muy alegre y ameno, actuando como un excelente anfitrión. Discutimos asuntos relacionados con nuestra Amazonía, centrándonos en las comunidades hermanas que la habitan. En el caso de Perú, son 51 comunidades nativas que merecen un respaldo total por parte del gobierno. El presidente Lula comparte la misma perspectiva, y así como a mí, como presidenta peruana, le preocupa la persistente pobreza enraizada en nuestra Amazonía».
El segundo desplazamiento de Boluarte tuvo como destino Nueva York, Estados Unidos, y se realizó del 18 al 21 de septiembre pasados, con el propósito de participar en la Semana de Alto Nivel del Septuagésimo Octavo Período de Sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
En esa ocasión, la presidenta estuvo acompañada por los ministros Ana Cecilia Gervasi (Cancillería), Juan Carlos Mathews (Comercio Exterior y Turismo), César Vásquez (Salud) y Alex Contreras (MEF). Cabe añadir que este último recibió U$2 640 en concepto de viáticos, mientras que el resto del equipo obtuvo un total de US$1 760.
En relación con su tercer viaje, la presidenta llevó a cabo una gira oficial por Europa del 12 al 15 de octubre pasados. Durante este periplo, visitó Alemania, Italia y el Vaticano, donde mantuvo una reunión con un representante de la Iglesia católica y tuvo la oportunidad de fotografiarse con el papa Francisco. Para financiar este desplazamiento, se asignó un presupuesto de US$99 791, que equivalía a aproximadamente S/379 882 según el tipo de cambio en ese momento.
La agencia oficial Andina[1] informó que ese jueves, la presidenta participó como invitada de honor en el «Día de América Latina» y ofreció una presentación durante la cena oficial de este evento organizado por el gremio empresarial alemán Lateinamerika Verein e.V (LAV). Además, se programó una reunión con el alcalde de Stuttgart, Frank Nopper, el mismo día. Al día siguiente, será recibida en Berlín por el presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, con quien dialogará acerca del fortalecimiento de las relaciones bilaterales y la manera de «revitalizar» las visitas de altas autoridades alemanas a Perú.
Por último, como cuarto viaje, Boluarte llegó a Estados Unidos el 1 de noviembre para participar en la cumbre inaugural de líderes de la Alianza de las Américas para la Prosperidad Económica (APEP). A su llegada, fue recibida por miembros del Departamento de Estado estadounidense. Como es habitual, el Gobierno peruano asignó un presupuesto aproximado de S/123 340 para cubrir los viáticos de los altos funcionarios peruanos y su extensa delegación, compuesta por casi 30 personas en esta ocasión.
Un informe reciente de La República[2] reveló que en los primeros tres viajes de la jefa de Estado al extranjero, se destinó un presupuesto aproximado de S/942 000 solo para viáticos de la comitiva presidencial y pasajes aéreos, sin incluir los costos asociados al combustible para el avión presidencial, operado por la FAP, utilizado para todos estos traslados. Los destinos incluyeron Brasil (S/230 000), Estados Unidos (S/331 870) y Europa (S/379 882).
Ante las críticas al Ejecutivo por los considerables presupuestos en medio de una recesión y marcadas brechas económicas, la presidenta emitió una declaración: «Cada vez que uno sale, uno no se va de paseo. Vamos a trabajar arduamente», expresó a la prensa. No obstante, según declaraciones de sus ministros, estos desplazamientos, si bien buscan atraer inversión privada al país, también tienen un componente político para mejorar su imagen tras ser presuntamente señalada, según una investigación fiscal, como responsable política de las muertes de manifestantes durante los primeros meses de su gestión.
- Evaluación del permiso de salida
Previo al último viaje de la mandataria, el cual se llevó a cabo entre el 1 y el 4 de noviembre, el presidente del Parlamento, Alejandro Soto, como mencionamos, convocó a una sesión del Pleno en el Congreso de la República para evaluar el permiso de salida de Dina Boluarte de territorio nacional. Esta convocatoria y la sesión en sí han planteado interrogantes sobre la necesidad y relevancia de sus viajes al extranjero. En este contexto, es crucial considerar el motivo y alcance del viaje a Estados Unidos, donde participó en la Cumbre Inaugural de Líderes de la Alianza de las Américas para la Prosperidad Económica (APEP), así como la reciente aprobación que el congreso ha dado el día de hoy, jueves 9 de noviembre, para viajar a la Cumbre de APEC entre el 14 y el 18 de noviembre.
La justificación presentada por el ministro de Economía, Alex Contreras, en el marco de una recesión económica, resalta la importancia estratégica de este encuentro internacional para la recuperación y crecimiento económico del Perú[3]. No obstante, la convocatoria y el debate que ha surgido no solo por el cuarto permiso de salida, sino también por el quinto, plantea interrogantes sobre la necesidad y relevancia de los viajes al extranjero de la presidenta Dina Boluarte. Se suscitan debates sobre si estas salidas son fundamentales para la promoción de los intereses del Perú a nivel global o si, dada la situación económica, se deben priorizar otras estrategias y medidas de política interna. Esta discusión refleja el dilema constante entre la proyección internacional y las necesidades internas del país, especialmente en momentos de crisis económica.
En este contexto, la presencia de la presidenta en estos encuentros es percibida como una oportunidad para impulsar la recuperación económica del Perú al facilitar la interacción con líderes y representantes de otras naciones. Esta estrategia se respalda en la justificación presentada por el ministro de Economía, Alex Contreras. No obstante, la interacción con potenciales inversores y socios comerciales a nivel internacional para poder catalizar iniciativas y proyectos que contribuyan a la recuperación económica a largo plazo no es un argumento suficiente.
Ahora bien, a pesar de todo lo ocurrido con este cuarto viaje, el pleno del Congreso autorizó el quinto viaje de la presidenta Dina Boluarte al exterior. En esta oportunidad, se le otorgó permiso para viajar a los Estados Unidos con el fin de participar en la 30 Reunión de Líderes Económicos del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que se llevará a cabo en San Francisco, California.
La decisión de autorizar este viaje fue resultado de una votación en el Congreso, con un total de 62 votos a favor, 47 en contra y 5 en abstención[4]. Entre los congresistas que respaldaron el viaje de Boluarte se encuentran representantes de diversos partidos políticos, incluyendo Fuerza Popular, Alianza para el Progreso, Avanza País y Somos Perú, entre otros. Según se ha mencionado, esta decisión también puede generar debates y discusiones sobre la priorización de la representación internacional en un contexto de desafíos económicos internos. Esto se fundamenta principalmente en la ola de críticas que se han planteado a partir de los diversos pedidos de salida al extranjero. Tal como se evaluará en el siguiente punto, pese a las votaciones, existe un gran grupo de congresistas que se encuentra en contra de las solicitudes de la parlamentaria.
En ese sentido, el escenario actual no solo nos insta a calificar cada solicitud como pertinente o no, sino también a reflexionar sobre la efectividad de estos viajes presidenciales. Por lo que, la toma de decisiones debe ser cuidadosa y equilibrada, considerando siempre el bienestar y los intereses del país en su conjunto.
- Postura del Ejecutivo enfrentada a algunos parlamentarios
Cabe señalar en este punto que, estas decisiones de otorgar el permiso a la presidenta de salida del país no están exentas de controversias y cuestionamientos por parte de algunos sectores parlamentarios. Algunos legisladores plantean dudas sobre la pertinencia de la participación de Boluarte en la Cumbre APEP, sugiriendo que la situación económica requiere medidas más urgentes y focalizadas en el ámbito nacional. Este debate refleja la tensión entre la necesidad de representación internacional y las demandas internas del país en un momento de desafíos económicos.
La postura del Ejecutivo, representada por la ministra de Vivienda, Hania Pérez de Cuéllar[5], destaca la importancia de la presencia de Boluarte en este tipo de eventos internacionales. Pérez de Cuéllar subraya que es parte del rol presidencial representar al Perú en foros internacionales, y argumenta que en un contexto de recesión económica, es imperativo establecer contactos con inversionistas y presentar las oportunidades de inversión que el país ofrece. Esta visión refleja la creencia en que la participación activa en eventos internacionales puede tener un impacto positivo en la economía nacional a mediano y largo plazo.
Ante esto, se sabe, según lo comentado por el portal Infobae[6], que entre los puntos de consenso entre los congresistas, hubo acuerdo en que la presidenta Dina Boluarte no era la figura más idónea para representar al Perú en eventos internacionales. A pesar de esta opinión, muchos legisladores respaldaron su salida del país, como se ha dado a conocer hoy día. Así, dentro de los legisladores que expresaron reservas respecto a este viaje se encuentran Alejandro Muñante, Carlos Anderson, Francis Paredes, Silvana Robles, entre otros. Anderson, por ejemplo, propuso que Boluarte participara en el Foro de la APEC de manera virtual, formando parte de las conferencias de manera remota desde territorio peruano. Planteando así una similitud entre lo que se conoce actualmente como la presidencia “virtual”, cuestionando el por qué se podría dirigir el país virtualmente pero no asistir a una conferencia de esta misma manera.
Otras de las críticas recibidas en relación a esta solicitud, incluyen la ausencia de pronunciamiento por parte del Canciller con respecto al escándalo ocasionado por la última visita de Boluarte a la Casa Blanca. Este incidente generó una crisis en su cartera ministerial que culminó con la dimisión de su predecesora, Ana Cecilia Gervasi Díaz, así como del embajador de Perú en Estados Unidos. Incidente que tampoco puede ser pasado por alto porque también ha sido objeto de un intenso debate entre los legisladores y todos aquellos preocupados por la pertinencia de la participación de la mandataria en estos eventos internacionales.
Finalmente, no es posible concluir el presente texto sin abordar la iniciativa Legislativa N° 6312/2023-CR la cual fue presentada después de que la presidenta Dina Boluarte fuera acusada de proporcionar información inexacta a la representación nacional y de no llevar a cabo una «reunión bilateral» con el presidente estadounidense Joe Biden, a pesar de que este fue uno de los motivos que respaldaron la autorización de su viaje. Así, el el despacho del congresista Héctor Acuña, miembro de la bancada Unidad y Diálogo Parlamentario, presentó un proyecto de ley que le pondría fin a todos estos viajes.
El proyecto fue presentado con el apoyo de los legisladores Juan Burgos, Katy Ugarte, Silvana Robles, Susel Paredes, Ruth Luque, Luis Cordero y Edgar Reymundo, quienes también figuran como autores de la propuesta. La iniciativa tiene como objetivo revocar el artículo 8-A de la Ley N° 29158, el cual faculta a la jefa de Estado a desempeñar sus funciones de forma remota en caso de encontrarse fuera del país, cuando no haya vicepresidentes en ejercicio a quienes delegar el despacho presidencial, tal cual lo precisamos al comienzo del presente texto. Según el proyecto[7], la modificación propuesta por el Ejecutivo se considera contraproducente a la Constitución Política del Perú, al contravenir lo establecido en su artículo 115, al permitir de manera específica a la actual mandataria «ausentarse en perjuicio de la República».
- Reflexiones y conclusiones finales
En base a todo lo esgrimido, en medio del contexto económico en el que nos encontramos, los viajes de la presidenta Dina Boluarte han generado un intenso debate en el ámbito político peruano. La aprobación de los permisos para sus salidas del país ha suscitado controversias y cuestionamientos por parte de algunos sectores parlamentarios, quienes argumentan que la situación económica demanda medidas más urgentes a nivel nacional. Este dilema refleja la constante tensión entre la necesidad de representación internacional y las demandas internas del país, especialmente en momentos de crisis económica.
Por lo que, en última instancia, la toma de decisiones respecto a los viajes presidenciales debe ser cuidadosa y considerada, priorizando siempre el bienestar y los intereses del país en su conjunto. Es crucial que se analicen las implicancias y frutos de estos desplazamientos, especialmente en el actual contexto económico. La discusión sobre la representación internacional y las necesidades internas del país continuará siendo un tema central en la política peruana, y requerirá un enfoque equilibrado y sensato para encontrar soluciones que beneficien a la nación en su totalidad.
Editorial escrito por Adriana García y Hilary Vega.
[1]https://andina.pe/agencia/galeria-presidenta-dina-boluarte-participa-desde-alemania-actividad-por-dia-america-latina-20188.aspx
[2] https://larepublica.pe/politica/gobierno/2023/10/31/congreso-dina-boluarte-gasto-casi-un-millon-de-soles-en-sus-viajes-al-exterior-irtp-apep-ministerio-de-relaciones-exteriores-1873440
[3] https://www.msn.com/es-pe/noticias/peru/congreso-debatir%C3%A1-el-lunes-30-de-octubre-el-permiso-de-salida-de-dina-boluarte-a-estados-unidos/ar-AA1iXPhL
[4] https://elcomercio.pe/politica/gobierno/congreso-en-vivo-dina-boluarte-permiso-nuevo-viaje-a-a-estados-unidos-para-cumbre-de-apec-quinto-viaje-noticia/?ref=ecr
[5] https://gestion.pe/peru/politica/desde-el-ejecutivo-piden-reflexion-a-congresistas-a-fin-de-que-aprueben-viaje-de-boluarte-a-eeuu-noticia/
[6] https://www.infobae.com/peru/2023/11/09/congreso-en-vivo-pleno-debate-nuevo-viaje-de-dina-boluarte-a-estados-unidos/
[7] https://www.infobae.com/peru/2023/11/07/fin-a-los-viajes-de-dina-boluarte-presentan-proyecto-para-derogar-despacho-remoto-de-presidencia/