Menos Derecho = mejores abogados

0
814

Por Gino Rivas, abogado, profesor en la PUCP y en la UP.

La clave para tener mejores abogados podría encontrarse en, irónicamente, estudiar menos Derecho. 

He tenido el privilegio de estudiar una maestría en leyes en Columbia University. La experiencia fue enriquecedora en todos los sentidos y me permitió comparar cómo se estudia el Derecho en Estados Unidos y en nuestro país. Para empezar, allá la carrera de Derecho es considerada un postgrado y su culminación te hace merecedor del grado de Doctor (Juris Doctor). Al ser un postgrado, para estudiar Derecho es requisito estudiar primero una carrera de pregrado (que por regla general toma cuatro años). Así, quien quiere ser abogado debe estudiar primero economía, negocios, ciencias políticas, periodismo, o cualquier otro programa de pregrado —puede ser incluso uno de matemáticas—. Este esquema se justifica en la necesidad de que los estudiantes de leyes tengan un conocimiento suficiente en ciencias o letras y que cuenten con una plataforma intelectual sobre la cual estudiar Derecho. En efecto, una persona con un título de pregrado cuenta ya con competencias básicas para redactar, investigar, generar ideas, resolver problemas y analizar con sentido crítico. 

Y claro, hay un abismo entre entrar a una facultad de Derecho teniendo ya un grado de bachiller y hacerlo recién salido del colegio. En Perú, solo algunas universidades mantienen la tradición de dedicar el primer año de formación —o incluso los dos primeros años— a “estudios generales” antes de llegar a la carrera de Derecho en sí. Pero ese tiempo, con todo importante, palidece a comparación de exigir estudiar toda una carrera de pregrado para recién después de ello estudiar Derecho. 

Esta no es la única sorpresa. Mientras que en Perú la carrera de Derecho suele durar cinco años, en Estados Unidos el programa dura solo tres. El abogado estadounidense, entonces, ha estudiado “menos” Derecho que sus pares peruanos. Podría hasta decirse que el abogado estadounidense sabe “más” de su “otra” carrera que de Derecho. 

¿Cómo es posible esto? ¿Cómo puede estudiarse Derecho en solo tres años? Lo central —y esto ya se ha dicho— es aprender a pensar como abogado, y es difícil sostener que se necesitan cinco o más años para lograr eso. Luego, habría que invertir la pregunta y cuestionar la extensión de la carrera en nuestro país. No queda claro si es necesario estudiar tanto tiempo Derecho. Uno ve los planes de estudios de las principales universidades y podría preguntarse si es acertado que cursos de propiedad intelectual, derecho bancario, regímenes tributarios específicos o delitos contra la administración pública sean cursos obligatorios. Habría que evaluar si eso es realmente necesario (énfasis en esa palabra) para ser abogado. 

Quizá, entonces, la necesaria reforma para obtener mejores operadores jurídicos pase por hacer que estos estudien menos Derecho. Sí, menos. No tenemos que llegar a replicar el modelo estadounidense —que a fin de cuentas es una excepción a nivel global—, pero podemos apuntar a brindar una base más integral a nuestros futuros abogados, extendiendo el número de cursos de estudios generales e implementando más cursos interdisciplinarios. Esta base, menos jurídica y más humanista, podría producir mejores abogados, profesionales con un mayor sentido crítico, y comprometidos a afrontar el desafío de lograr una sociedad más justa.